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martes, 31 de mayo de 2011

Vendí hogar

Hogar rinconero completo con tapa de Ónix y leños a gas 5000 Kcalorías con válvula de seguridad $550
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80 cmts de alto x 75 cmts de ancho visto de frente (56 cmts cada lado contra la pared, + 10 cmts de curva en la punta)

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VENDIDO
:)

jueves, 19 de mayo de 2011

La Sagrada Feria

Ya posteé fotos de la Feria del Libro 2008, 2009 y 2010,
así que ahora no podían faltar algunas del 2011.
Arranquemos con este bestia bruta, a la que
debe soplarle el más zorro de la clase.
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En las mesas se mezclan actrices (me refiero a Miley Cyrus)
con Sai Baba o Firmenich. El slogan: Patria o Tercera Edición.
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Otra extraña combinación de títulos: Tras las
bambalinas del Poder... Un PT en Argentina.
El doble sentido corre por cuenta de Lewinsky.
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En primerísimo plano, el libro "Abajo el velo".
Allí detrás, apenas visibles, unas musulmanas
dejan -en la foto y la realidad- abajo ese libro...
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Son las mismas a las que me referí en mi post del 15.
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Y si viéramos mejor, no son las únicas mujeres así vestidas
que tranquilamente pasean viendo libros según "su" moda.
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Nota al pie (al pie de esta foto): Títulos como "El efecto
Lucifer", "Economía emocional" y "La experiencia del placer".

lunes, 16 de mayo de 2011

Juan Carlos Chebez, entre los que se van

"Hay hombres que luchan un día y son buenos.
Hay otros que luchan un año y son mejores.
Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos.
Pero los hay que luchan toda la vida:
esos son los imprescindibles."
(Bertolt Brecht)
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Los grandes medios de información publicarían grande su deceso en tapa, si no se ocuparan sólo de los famosos del entretenimiento. Pero Juan Carlos no fue una estrella del deporte o del espectáculo o de estar encerrado en una casa mientras lo espía una audiencia. Su muerte tampoco tiene el morboso atractivo de la sección policial. Como tantos anónimos médicos, bomberos o maestros, simplemente fue otro ciudadano que luchó por un país que lo desconoce hasta el último respiro.
Hace unas horas me enteré de su muerte, este mismo domingo. Tenía sólo 49 años, y toda una vida consagrada a la protección de nuestra naturaleza. Protección que llevó adelante por medio de su estudio profundo y de una consecuente tarea de difusión, que acompañaron su desempeño en funciones públicas desde las cuales hacer todo lo posible, desde promover nuevos parques nacionales hasta salvar la selva paranaense. Vean la imagen satelital de Misiones: entre países que destruyeron su fauna y flora nativa, la provincia es esa mancha verde que muestra -sin necesidad de dibujar las fronteras- nuestro territorio nacional, al que quedó acotada esa riquísima porción de naturaleza gracias a la acción de hombres como Chébez.
Autodidacta imprescindible (como la Historia precisó a Schliemann para desenterrar Troya cuando las cátedras descreían de mitos, como la Geografía precisó a Colón cuando los sabios de Salamanca se creían con los pies sobre la tierra... plana), deja al mismo tiempo una camada de ambientalistas en acción y un vacío enorme en la trinchera defensiva de nuestro patrimonio natural. Con uno de sus libros en la mano acabo de escribir con enciclopédica frialdad su biografía en Wikipedia: abrí una cuenta allí sólo con ese propósito.
Métanse en su sitio (donde me di el gusto de publicar sobre Cousteau y Maradona), búsquenlo en YouTube y en las librerías. Yo todavía no puedo creer que no lo encontraré de otra forma, para debatir apasionadamente temas de la más trascendente actualidad oculta, o simplemente recordar milongas de su querido Atahualpa. Así me sale recordarte, nombrador. Allí estás ahora, con los que se fueron.
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domingo, 15 de mayo de 2011

De cristales y frágiles

"El ojo que tú ves / no es ojo porque así lo veas / Es ojo porque te ve".

Prólogo- Así se lo leí a Machado. Y siglos antes, dicen que un tal Jesús criticaba también a la gente que "ve la paja en el ojo ajeno, cuando ella misma tiene una viga en el propio". Es que acaso no sea raro ver esa basurita del otro, justamente, porque somos más de ver ojos que miradas.

Las grandes fracciones del mundo (como occidente, o como medio oriente) aparentan conocer bien el ojo ajeno, desde su propia visión claro, pero poco y mal saben de la mirada del otro. En su propio espejo, también pareciera que sólo ven ojos. Desde que hay cine, nuestros sueños tienen una puesta de cámara y pareciera que repasamos nuestra vida con el mejor director a cargo, aquél que da protagonismo a la historia y no a sí mismo. Desde antes, desde que nuestros ojos que no son de mosca ni de araña están por delante como buenos animales carnívoros y no a los costados como aquellos hervíboros que deben estar listos para huir, nuestra mirada está condicionada inevitablemente. Allí están nuestras presas, y vamos a escupir nuestras verdades con menos lengua que dientes.

I- El pasado lunes estuve en la Feria del Libro y vi cuando una occidental usaba su boca para atacar (aunque ella creía que para defender) a tres musulmanas, porque no desnudaban su rostro a la vista de los extraños como exige esta sociedad. Impúdicamente exponían una moda que incluye una prenda para la cara, en vez de lucir "normales" como quienes paseaban con horadaciones en su carne atravesadas por minerales, la piel flagelada para portar símbolos indelebles, la cabellera quemada por planchas y tinturas, el cuello cargando la réplica de un torturado clavado a una cruz, las piernas apretadas por incómodos pantalones que agraden a los machos y el caminar pendiente del buen funcionamiento de unos tacos insalubres. Las vi evitar mayor discusión para poder seguir recorriendo la Feria, y en esos metros en que fueron cerca mío las oí decirse: "Para qué quiere verme, si le resultaría fea" y reír las tres. Inevitablemente recordé que en París las meterían presas, pues en el país de la liberté, égalité, fraternité encarcelan a las musulmanas sólo por lucir velo.Todo en nombre de sus derechos, que son los que dictaminemos nosotros.

II- Ya fuera de la feria, quiso nuevamente el azar que viese por un momento un programa de nuestra TV abierta, donde jóvenes colegiales compiten para ameritar un viaje de egresados. Pero los viajes ya no son de estudios ni los programas premian (ni comparten) el conocimiento, así que su modalidad va a tono con los valores actuales de nuestra sociedad: allí desafiaban a una menor a comerse una cucaracha viva en público bajo la presión de las cámaras, sus compañeros que desean ganar el viaje y el "conductor" del "programa" (en más de un sentido). El mensaje es claro: "Premiamos a las chicas que traguen lo que sea a cambio de una retribución material"...

III- Todo sucedió el mismo día. Ese lunes en que un informe en el diario Clarín (perteneciente al mismo grupo que transmite ese constructivo programa) había referido durante esa mañana a la desprotección que tienen nuestros menores ante el avance del turismo sexual en el país. Nuestro cristal -tan útil para criticar el ajeno- se horroriza con asombro de que todos los años llegue el gringo al interior para cazar fauna autóctona, armado y desalmado, comprando cuerpos y dolores ajenos por unos dólares que aumenten nuestra miseria. Eso es Occidente. Y un velo parece tapárnoslo.

Epílogo- El machismo y la brutalidad no es exclusividad del otro. El premio Nobel de la Paz manda asesinar a un asesino porque asesinar es malo. Esa extraña lógica aquí parece más comprensible que si en Irán un hombre -que al ser rechazado por la bella mujer que él deseaba la roció con ácido deformándola y dejándola ciega- sea condenado a quedar ciego. Y eso que ambas acciones (las del gobierno occidental y la de la justicia persa) comparten la matriz. Lo normal en nuestros pagos parece ser que un hombre prenda fuego a "su" mujer y siga libre, permitir salidas a violadores reincidentes, o que ande suelto quien asesinó a su esposa e hijas, como Barreda u otro. Y mientras discutimos el barbijo ajeno, abrimos la boca de nuestros hijos a lo que le metan los fabricantes de espejos de colores.