Regalando Ideas V

En esta nueva entrega ("entrega": temo que con doble sentido) no publicaré inventos materiales, sino ofertas laborales de mi invención. No tendrán el humor surrealista del gran Igor, principalmente porque no van por ese lado, y hasta es posible que ya existan y yo no esté enterado. No importa: en tanto no sabía que algo de esto ya se esté haciendo, no dejo de haberlos creado de la nada. Claro que, si aparecen después, no dejaré de dar por seguro que me leyeron esta bitácora íntima (?) y me robaron la idea, con lo cual deberán entregarme la mitad de lo recaudado. O sea: me llevo el Haber, y les dejo el Debe. Será Justicia.

• Paseador de personas: Como el perros, pero para nosotros. Y atención, que no hablo de las enfermeras que te sacan a pasear a la nonna por consejo del doctor; no. También a nosotros los jóvenes (?) nos vence el desgano y la falta de conducta para salir todos los días a caminar una mínima cantidad de cuadras (o de tiempo) recomendables. El paseador de personas bien podría ser un estudiante universitario avanzado, de carreras afines al tema que quiera el cliente. Uno puede querer pasear con alguien que nos hable de filosofía, nos explique matemáticas, sepa discutir de fútbol, o nos vaya psicoanalizando. Esto hace a la caminata doblemente provechosa. El riesgo sería que, hablando, nos saque información para que sus amigos desvalijen nuestra casa mientras él está con nosotros (coartada perfecta). Peor aún, también puede resultar un predicador camuflado, aprovechando el paseo para afiliarnos a su credo. Por eso son importantes las referencias. Yo me ofrezco a acompañar muchachas.
• Alquiler de mascotas: ¿Tu criatura insiste con que quiere un perrito, y promete hacerse cargo de todo su cuidado? Bien: ahora se podría alquilar un perro por 3 meses, a ver "qué tan cierto". Llegado el momento, podrá ser comprado, o renovarse el contrato. La idea es que este servicio lo ofrezcan quienes juntan perros de la calle, y siempre terminan reubicando menos mascotas de las que se les van sumando en busca de adopción. Con esto, no sólo obtienen ingresos directos, sino que además ahorrar mientras tanto en el mantenimiento. Más adelante podría legislarse esta práctica como 'obligatoria' antes de cualquier compra definitiva. Para quien dude si tener o no una mascota, y cuál, el servicio es ideal, y hasta lo es para el perro: si siendo maduro no lo quieren por buscar un cachorro, ya está claro que no pueden tener ninguna.
• Cursos gratuitos al aire libre: Aquí la única ganancia es invertir en nuestro buen nombre y enganchar gente para pagar después los cursos avanzados. Si bien esta práctica ya se da, tal como es el caso de quienes hacen Tai-chi en las plazas, los que propongo son otros (primeros auxilios, idiomas, etc). Ejemplo: uno de Astronomía a cielo abierto, para aprender a orientarnos con las estrellas, sin instrumentos, y a reconocerlas, así como a otros astros y constelaciones, todo a simple vista. La clase sería, desde luego, nocturna.