La relación de los argentinos con la muerte es peculiar. Por un lado, hay cierto morbo necrológico que nos hace trasladar cadáveres de una lado a otro (Rosas, etc.), extraerles partes (las manos de Perón, los dientes de Belgrano...) y conmemorar de nuestros ídolos más su defunción que su venida al mundo. Por ejemplo, el 25 pasado cumplía años San Martín... pero nada: esperaremos a agosto para el feriado de su muerte. Y en cambio con aquello que lejos de beneficiarnos resultó un castigo ¡recordamos su inicio y no su final! Así, en vez de celebrar cada 10 de diciembre la llegada de la democracia -coincidente con el Día internacional de los derechos humanos- “festejamos” el 24 de marzo en que empezó la peor dictadura del siglo XX en Argentina. (A propósito ¿a dónde iréis de viaje?...) ¡Con razón después no entendemos al 12 de octubre!
Por otro lado, aunque esto ya es mundial, no podemos evitar santificar a todo famoso que muera “en plena vida”. Ustedes discúlpenme, pero si Tanguito no moría como lo hizo, hoy sería un Lito Nebbia cantando para cuatro pelados de trenza canosa. Y así muchos sobre todo en la música y desde la invención del vinilo, pues las discográficas deben seguir haciendo dinero. El morbo hizo incluso que la cantidad vendida del último CD de Callejeros se eleve, como una bengala, desde la misma noche trágica que todos conocemos.
Pero yo quería protestar hoy por otra cosa vinculada al tema, y son las muertes de aquellos que fueron ídolos en vida... Y que sabemos que a medida que pase el tiempo, aunque sea muy lentamente, se nos irán desvaneciendo hasta que el fantasma quede invisible. Es lo mismo que sentirán sus seguidores actuales cuando parta gente como Dolina o Les Luthiers. O lo que hemos sentido muchos con las muertes de Soriano, Abrevaya, Castelo, Tato Bores, Espalter, Olmedo, el negro Fontanarrosa, nuestros propios y anónimos queridos cercanos, y más recientemente, Jorge Guinzburg. Muertes odiosas, pérdidas de piezas que en nuestra maquinaria de supervivencia no parecen tener recambio.
Algunos serán leyenda, como Evita o Gardel. Otros, un grato recuerdo generacional y por ende con inmerecida fecha de vencimiento (¿Parravicini? ¿Niní Marshall?). No sé cómo terminar este post de tan largo prólogo. Tal vez lo suicide acá, y lo reanimen sus comentarios...
Por otro lado, aunque esto ya es mundial, no podemos evitar santificar a todo famoso que muera “en plena vida”. Ustedes discúlpenme, pero si Tanguito no moría como lo hizo, hoy sería un Lito Nebbia cantando para cuatro pelados de trenza canosa. Y así muchos sobre todo en la música y desde la invención del vinilo, pues las discográficas deben seguir haciendo dinero. El morbo hizo incluso que la cantidad vendida del último CD de Callejeros se eleve, como una bengala, desde la misma noche trágica que todos conocemos.
Pero yo quería protestar hoy por otra cosa vinculada al tema, y son las muertes de aquellos que fueron ídolos en vida... Y que sabemos que a medida que pase el tiempo, aunque sea muy lentamente, se nos irán desvaneciendo hasta que el fantasma quede invisible. Es lo mismo que sentirán sus seguidores actuales cuando parta gente como Dolina o Les Luthiers. O lo que hemos sentido muchos con las muertes de Soriano, Abrevaya, Castelo, Tato Bores, Espalter, Olmedo, el negro Fontanarrosa, nuestros propios y anónimos queridos cercanos, y más recientemente, Jorge Guinzburg. Muertes odiosas, pérdidas de piezas que en nuestra maquinaria de supervivencia no parecen tener recambio.
Algunos serán leyenda, como Evita o Gardel. Otros, un grato recuerdo generacional y por ende con inmerecida fecha de vencimiento (¿Parravicini? ¿Niní Marshall?). No sé cómo terminar este post de tan largo prólogo. Tal vez lo suicide acá, y lo reanimen sus comentarios...
28 comentarios:
Permitirme la discrepancia con tu opinión, don Servidor, pero no creo que los que fueron ídolos o exitosos en vida sean olvidados fácilmente.
Existe un olvido lógico por la falta de presencia, pero lo que dejo la persona en cuestión es lo que hace crecer en el tiempo su carácter de ídolo.
Ejemplos de esto son las personas que nombraste. Soriano fue un periodista exitoso en vida, pero creció en el tiempo con las reediciones de sus libros. Tato Bores es otro ejemplo, en vida fue muy exitoso, pero con el tiempo y su constante presencia hace que se vaya convirtiendo en leyenda.
Olmedo es una excepción, en vida fue exitoso pero hasta cierto punto, después de su muerte se convirtió en ídolo popular.
Creo que el legado de todos ellos es mucho, pero muchísimo mas fuerte hoy en día...Eso trae otro tema, que creo es mas escabroso...¿por que no son reconocidos debidamente en vida? Quizás la ausencia es un factor importantísimo, por lo de 'cuando no están se aprecia su importancia'...
Prometo terminarlo, o algo así, pero me va a llevar más tiempo y espacio que un simple comentario.
El domingo fui a pasear por Recoleta y justo pesqué una visita guiada por el cementerio.
Además de escuchar algunas cosas y reflexionar sobre lo que es la actual visión de la muerte, en contraste con lo que era hace años la idea de "morirse", "salud" y transmisión de legados para los que quedaban, encontré algo bastante curioso y sobre lo que quería escribir en la semana (cosa que no hice porque bastante lúgubre viene estando mi blog).
Este post tuyo tiene algo de introductorio a lo que me pasó el domingo, así que tiene retome garantizado desde allá, cuando haya de nuevo ambiente para escribir sobre eso.
Cale: Tu opinión no me discrepa, por el contrario me completa el post (pero no pienses en cobrar). Quise tratar 3 temas juntos en un sólo palabrerío breve, y así quedan las cosas. Hay gente a quienes la muerte los agiganta, aún cuando ya no queden testigos de su existencia (¿Jesús?); otros a quienes le pasa lo mismo hasta que murió el último nieto del último testigo (¿Pepino el 88?) y otros que fueron famosos y "desaparecen" del conocimiento colectivo (salvo si te lo hacen leer en la escuela, o los reflota un guionista de cine), pero si te diera un ejemplo con nombre y apellido me contradeciría en lo del olvido, así que no te lo diré (pero lo sé, eh, mirá que lo sé, pero muere conmigo). Es como los antiguos best sellers que se acumulan en mesas de saldos, o viejos vinilos de artistas que en su momento no podías desconocer. Hay de hecho "muertos en vida" ¿qué fue del actor que hacía de...?
(otra vez no sé cómo terminar)
Realmente el tema de la muerte es conflictivo para mi, pero siempre del lado de los vivos.
En primer lugar, dicen que la Muerte, es la gran igualadora, es decir que tarde o temprano TODOS -ricos y pobres- vamos a morir. Bueno, eso no me impresiona mucho, ni me hace sentir mejor, porque en realidad no es el destino final el que me preocupa, sinó el viaje hacia allí. ¿Viajamos de Posadas a Buenos Aires en 1:30 hs. en avión, o tardamos 47 hs. en "El Gran Capitán"?
Claro, cuando llegamos a Buenos Aires, todos somos iguales, pero ¿mientras tanto? Algo similar sucede con la Muerte.
Por otro lado, si algo bueno tiene la Muerte (como hacer un poquito de lugar para que entre gente nueva) es la capacidad de "abuenar" a los difuntos. El más desgraciado, el que no le pasa alimentos a sus hijos, o trampea impuestos, pasa a ser un "buen tipo". ¿Te acordás los asadasos que hacía el Jorge?. Y pagaba siempre él. Que tipazo, ¡cómo lo vamos a extrañar!
Claro, mientras tanto, el tipo veía al hijo una vez al año, y le pasaba $ 100 a la mujer para que se arreglara con el chico.
Tal como dice unservidor, el reconocimiento de los verdaderos valores es efímero, con muy pocas excepciones. Pero ¿no es mejor así? Los actos escolares durarían -todos los días- 18 horas, y los canales de televisión pasarían 24 horas de "Tributo a ...", recordando los mejores momentos de los ya idos.
¿Podríamos vivir en un estado de pasado constante, sin presente y sin futuro?
La verdad, no lo sé.
Servidor: Creo que se desvanecen en la memoria de aquellos que no conocen realmente la obra del que dicen admirar.
Lloran la muerte de la figura, porque se impone en el momento, porque es políticamente correcto lamentarse.
Pero quienes sentimos afecto y deleite por la obra de un artista, lo que más lamentamos el día que mueren, es que se corta la producción.
Al personaje le podés tener afecto, cariño, aunque no lo conozcas personalmente. Si es un Abrevaya o un Castelo, es como un tio. Todas las mañanas lo invitaste a tu casa y escuchaste y opinaste y te reiste con ellos. Se murió? Extrañas la compañia que te brindaba, esa vencina que te ponían en el encendedor seco del cerebro.
perdón: bencina.
=P
Bater, haga uso (unas fichitas para un día ser mantantirulink).
=ºD
Además yo volqué todo al hilo, ante la muerte de Guinzburg, pero ud es inteligente y tiene tiempo para pensar, así que va estar bueno.
Ah! Posdata para Cale: con lo que puse de Les Luthiers o Dolina le repito que no siempre se espera a la pérdida para valorar... es gente que uno no quisiera que muera. Pero es cierto que si un día alguien le hace un documental alusivo, seguramente será porque pichó. Es el karma del "in memorian"... Ningún homenaje en vida (¿será que publicar tus obras completas requiere que ya no puedas escribir?). Chan!
Sendos abrazos
Qué bien escribís. Mi comentario es liviano, no estoy muy filosófica hoy.
Concuerdo con la idea del morbo nacional: es cierto que nos encanta trasladar cadáveres (cuando no robarlos y tenerlos estacionados en una furgoneta en la vereda de la SIDE, qué historia vergonzosa).
Sobre el tema de los feriados, leí alguna vez que como San Martín y Belgrano habían nacido en febrero se decidió ex profeso recordar sus muertes para que los feriados no nos cayeran en verano. El estilo nacional, ¿no?
En otro orden de cosas, lamenté profundamente la muerte de Jorge Guinzburg, porque parecía tan buen tipo y porque era uno de los pocos que me hacía reír.
Ah, pero entraron todos juntos! Yo contestando a la segunda, y me queda publicado después de otro par! jajaja.
Dr.Froi: Un verdadero gustazo tenerlo por acá. No sé si anduvo antes, pero es su primer comentario y tal como hubiera apostado, me enaltece la esquina. A mí también me asusta más el durante que el después. Y es cierto que palmarla nos abuena a los atorrantes, pero también pienso (sin contradecirlo) la altísima posibilidad de que gente cuyo honor fue manchado y murió sin posibilidad de defensa, sean hoy indudables porquerías de la historia... sin serlo en la realidad (posible ejemplo ¿qué tal si realmente fueron los cristianos quienes quemaron Roma, y Nerón mientras se agarraba la cabeza en vez de la lira? No sé, digo).
Abrazo y un juego de llaves.
Fla-q, gran verdad su aporte; mejor que yo, mire. Se lo agradezco. Saludos al becindario...
;)
NoTanIguales: Me va a poner colorado. ¡y cómo me olvidé de la mujer momificada del "tirano prófugo"! No sabía lo de San Martín y Belgrano... ahora me cierra ¡tiene que estar en el calendario escolar! Por eso el día del Maestro cuando muere Sarmiento ¡otro que nació en verano! Gracias.
Voy a aprovechar que a esta hora están todos durmiendo, y les dejo a los lectores de "Seleccione" un dato, que no sé si puedo poner aqui, ya que podría estar violando alguna norma, como hay en otros blogs.
Busquen en el blog de Clarín "Yo contra el mundo" (http://weblogs.clarin.com/podeti/) y van a encontrar que los comentarios de unservidor son siempre mesurados e inteligentes, además de respetuosos.
Es el único que no azuza mi paranoia.
Pero eso sí, un ratito y despues vuelven eh!
No los quiero ver dando vueltas por otros blogs.
La verdad es que a mí un poco si me asusta la muerte y encima no es algo que pueda trabajar o evitar como no sé la hidrofobia u otras cosas.
Y encima ahora que me sacaron el purgatorio!!! no sé como voy a hacer para no irme derechito para abajo! Saludos!
che, pero cuando san martín nació no era nadie todavía!!!!
El interés en el morbo se vuelve un circulo vicioso entre quienes ofrecen a La Muerte como un articulo de consumo y los consumidores. En el caso de los personajes celebres, muchos que ponen su mejor cara de tristeza ante las cámaras, se frotan las manos con lo que van a ganar explotando al muertito, pero rapido, antes que la gilada se distraiga con otra cosa. Recuerdo un especial de clarín sobre fontanarrosa, una semana después de su muerte, también los interminables especiales de tv cada vez que se aproxima la fecha de Tato, algo parecido pasó con Castelo. Ponen en venta el cadaver, y compradores no faltan. No es nuevo ni es un fenómeno local. Como muchos saben, en muchas iglesias se conservan reliquias santas, o sea, pedazos de cadáveres de santos, y los fieles se posternan y dejan la limosna.
Servidor..qué buen filo le está dando usted a sus letras, ya lo estoy envidiando vea.
Primero quisiera aclarar que según el post tendríamos que esperar a octubre para "festejar" la muerte de San Martín y sería medio en vano teniendo en cuenta que el valiente murió en agosto juassssssss ( sé que es un error de tipeo don Servidor).
Ahondando en el tema, coincido un poco con lo que theflaq dice, tiene que ver un poco con la admiración que tenga cada uno y lo mediático del difunto, es decir, Jorge L. Borges es el escritor más renombrado de los Argentinos a nivel internacional y sin embargo dudo que recuerden en que fecha murió ó nació hecho que no marca la diferencia en la admiración o el reconocimiento.
Figuras más mediáticas tienen otra perspectiva que hace que funcione un obituario constante, en definitiva coincido plenamente con lo que dice Servidor, mi impresión es que somos corruptos hasta con la muerte.
Aplauso, medalla y beso Servidor!
Mar: Salga a curar la hidrofobia al prójimo y se va derecho pa'arriba (además, usted al infierno lo apagaría... No es negocio para el diablo).
Horacio: jajajajaja (y cuando murió ya había sido). Me imagino al alumno Sarmiento en un acto del día del Maestro, sin saber porqué esa fecha... "Ya vas a saber, nene... jejeje... Tiempo al tiempo..." ¡Da para un cuento ucrónico!
Ajenjo: Los medios ya deben estar preparando informes especiales sobre "genios vivos" como los citados, o Landriscina, Juan Carlos Mesa, etc. para tener listos cuando mueran. Y mientras tanto "lo siento maestro, no tenemos trabajo para ud ahora"...
Buen aporte el de las reliquias ¡y cómo movilizan aún!
Graci: Graceas por el halago y más por corregirme (¿estaría ya pensando con el remate sobre el 12/10, o en lo de Perón y me equivoqué de 17?) Ahora lo puse bien.
De orgullo, yo te corrijo que esta "fla-q" no es la "theflaq" que ud conoce.
Me limité en ejemplos para no extenderme (no toqué a Gilda, Rodrigo, Fangio, etc) y es interesante lo que decís de Borges, que me da para otro futuro post.
vos sabés que los argentino somos melancólicos, dicen que es porque somos muchas razas juntas, no se, pero no nos olvidamos de los ídolos, hace una semana todos se acordaban de Olmedo, claro... eso sí el aniversario de su muerte, pero los homenajes lo mostraban vívido, con su gracia inigualable, sin vencer, como si fuera ayer.
los de Jorge fue una puñalada traicionera, era mi compañía diaria, es casi, como reprogramar el día, la mañana era de él, he reído hasta llorar y eso se lo agradezco, nadie me puede quitar el tiempo compartido.
Las fechas, son un imponderable, en nada cambian la admiración o la bronca que sentimos por ellos.
besos Selecc, y dejeme decirle que Ud. como Gardel, cada día escribe mejor...jajaja
"La muerte enaltece" decían las viejas, y hasta cierto punto se cumplía, lo cual no deja de ser una injusticia para con los que realmente han sido buena gente. El asunto que se me presentó al leer es: ¿importa si un gran artista es también una buena persona? en tal caso, ¿su legado artístico será olvidado por culpa de su comportamiento tal vez cuestionable, o prevalece su arte por encima de sus calidades humanas? Sería interesante, me parece, separar a aquéllos que de algún modo dejan un legado para ser recordados en la posteridad de los que pasan a la historia por hechos políticos, por ejemplo, porque entonces su vida pasa a ser de algún modo su obra... Igualmente, es verdad que hay siempre (no sé si es aquí, me parece que en todas partes) un cierto revolcarse en las vidas y obras de los muertos más que en homenajearlos en vida y agradecerles lo hecho. O, como con Fontanarrosa, se hace apuradito cuando está al borde de la partida.
No sé si divagué mucho, pero creo que la cosa da tela para preguntarse y preguntar.
Saludos!
Estimada Sra. Ani:
Personalmente, me gustó mucho lo que escribió.
Y una referencia de alguien que ya vivió algunos años: Nunca se divaga lo suficiente.
Servidor: Cuando usted dice "los medios deben estar preparando...", le agrego que en todas las redacciones de todas las publicaciones periodísticas los obituarios se confecionan de antemano, con los logros de cada personaje, día tras día, mucho antes de que estiren la patita.
Ahora, con Internet, supongo que será menos rígido el asunto. Pero el encargado de redactar las biografías del difunto, antes, tenía toda la data lista para el ULTIMO MOMENTO! MURIO .... diariamente.
Morbo anticipado? No!
Boy Scout periodístico: Siempre listo!
Gracias Moni. "Mañanas informales" decidió poner a Ronnie Arias en lugar de JG... ¿estás pensando lo mismo que yo? (Rony, no es con vos la cosa).
Ani, efectivamente ahí hay otro morbo: revolver biografías con la peor leche para sorprendernos con alguna porquería del santo difunto. A mí me nutren sus grandezas, no las bajezas que en todo caso servirán a quien las convierte en ganancia económica.
Fla-q: Si es así, pobre el empleado pues no daría a basto... imaginate que trabaje en canal 13 ¡Suar iría todos los días a interrumpirlo para ver si su biografía va quedando bien en caso de que le caiga un meteorito!
Y el chabón prepara la propia, para que el medio diga "Se nos fue Idelfonso 'Buseca' Torales, quien fuera nuestro gran compañero de..." etc etc, y resulta que cuando muere ¡esa no se la publica nadie!
XD
Pavoroso lo de recordar las fechas de muerte y no las de nacimiento, por todo lo hablado aquì, no lo habìa visto de ese modo. Felicitaciones por el artìculo, don Unser, y por la nueva visita ilustre del dr Froi.
Coincido plenamente con su visiòn de las "muertes odiosas" (sobre todo viendo a Sofovich por ahì aùn)
Permiso, don Servi.
Dr. Froi: le agradezco, igual lo mío es más bien una expresión, tal vez una disculpa anticipada por si tomo inadvertidamente "el incierto rumbo de los tomates", diría Dolina. No sé cuántos lleva ud. pero le garantizo que los míos no son pocos... y en el fondo me parece que divagar apropiadamente también es un arte.
Servidor: las grandezas, guardarlas para siempre, las miserias, para qué, si sólo le dan de comer a los Riales de este mundo, no?
Me gusta esta... es casi una conversación.
Salute!
Hace unos días, le preguntaban en la tele a un escritor porque parecia que sus novelas siempre trataban sobre la muerte.
El tipo se acomodó en la silla, torció la boca, respiró hondo y dijo, algo así:
"Mire, la verdad, a mi me gusta más la vida que la muerte. Cuando escribo, escribo sobre la vida. La muerte... la muerte. La muerte es un acontecimiento más de la vida. Qué quiere que le diga. Yo prefiero a los vivos más que a los muertos. Pero sin muertos no podemos vivir."
Darkie, el tipo. Pero no sé, algo de esto me parece que tiene que ver con lo que escribió acá, vió?
Salú
V.
Muy buena la entrada (como siempre UnServidor) y los comentarios también.
El morbo está siempre presente, aquí y allá.
Por aquí alguno dijo que "-...la muerte nos iguala a todos..." pero me quedo con que podríamos decir exactamente lo mismo de la vida ya que todos nacemos, ergo, "La Vida nos iguala a todos".
Pero la vida podemos elegir cómo vivirla, qué actitudes tomar, qué caminos seguir... Incluso podremos decidir el momento (suicida claro) de nuestra propia muerte.
Retomando el hilo diré que no solo el morbo está presente, ya verán que otras cosas se sucederán...
Lamentablemente aparecerá el "chiste fácil" y el consabido tema de la "mufa" (tan porteña).
Y allí se empezará con que de "La Noticia Rebelde" van cayendo todos, que si "Tabaré", que "Mañanas Informales" (alimentado por el también reciente deceso de Mazzone) y que Fulano y Sutano vayan poniendo las barbas en remojo, etc. etc. etc.
Es lamentable pero es así.
En nombre de estos mismo pusilánimes que echan a correr este tipo de rumores, chismes y "chistes" hubo casos en que muchos hicieron mucho y bueno y porque algún idiota los tildó por ejemplo de "mufa" se quedaron hasta sin trabajo y, después de muertos, no se les dedicó mas que cinco líneas de la columna mas chiquita de un diario.
En fin...
Rapote
Zippo: "Muertes odiosas" era el título original del post... (luego le vi tantas ramas que lo cambié). Agrego también a Quino entre los valores vivientes.
:O
Ani: Converse nomás, dealé.
;)
Vontrier: Bienvenida al comentariazgo seleccionáu. Y seguro que sin muertos no podía vivir, si sus oscuros libros le dan el pan, no?
=D
Rapote: Creo que lo de la muerte es porque ricos y pobres acabamos siendo polvo, mientras al nacer uno lo hace en los yuyos y otro en cuna de oro... (claro que casi siempre de otro polvo...).
:P
!Qué vida corta la de Guinzburg! ;)
Publicar un comentario